Por Engles

Gigantes corporativos como Monsanto, Nestle, Kraft, McDonalds y otros nos controlan enterese como en este resumen del artículo de Wenonah Hauter quien acaba de publicar su libro Foodopoly (Alimentopolio), acerca del monopolio del sistema alimentario que nos alimenta hasta insecticidas:

Debemos reclamar nuestra Democracia!. Tener leyes que resuelvan este problema del control corporativo en lo que comemos!. Nuestro sistema alimentario debe estar en favor de los consumidores y agricultores, NO de agro-tóxicos, procesos químicos, tiendas y conglomerados corporativos. Empecemos con protestar en contra del desastroso caso de Citizen United (Ciudadanos Unidos) que permite que las corporaciones compren con dinero el sistema político.

Las 10 más grandes corporaciones controlan el 47% de las ventas de comida chatarra. Juntas están por encima de las economías locales, es clara la razón porque los mercaditos familiares han desaparecido, pero no es claro como esto ha influido en nuestro sistema político. Foodopoly es la historia de esto, por ejemplo 4 de las gigantes corporaciones procesan el 80% de las carnes que comemos, solo 4 tiendas venden el 50% de lo que compramos para comer. Hoy uno de cada 3 dólares que gastamos en comer en EUU va a parar a Walmart. Dense cuenta cuando estos monopolios controlan doméstica y globalmente gracias a los corruptos tratados de libre comercio, sus ganancias hacen que controlen con grandes sumas de dinero a los gobernantes de Washington.

La industria de alimentos gastó $40 millones de dólares en “lobismo”, sólo en el 2011, según el Centro de Política Responsable y la industria biotécnica más de medio billón de dólares desde 1999. Para la ley Agrícola “los interesados aportaron” $173.5 millones (en contra) en el 2003. Food & Water Watch (Vigilantes de Animales y Agua) una ONG en la que trabajo trata de luchar contra este control corporativo y apenas nuestro presupuesto es de 12 millones de dólares al año.

En los próximos meses, el presidente Obama atentará acelerar dos tratados de libre comercio: el TPP (siglas en ingles de Acuerdo Transpacífico) y el TAP (siglas del Acuerdo Tans-Atlántico). Ambos favorecen los intereses corporativos y su poder sobre los consumidores. Estos aumentaran la exportación del gas natural, de más importaciones, atentaran contra nuestras leyes domesticas e incrementaran el control corporativo sobre nuestros recursos naturales. Para siempre preservara este sistema económico que nos lleva a un desbalance económico causa de la crisis. Se necesita urgentemente reformar nuestro sistema alimenticio para empoderar nuestra democracia y solo puede ser posible cuando las personas demanden mejor liderazgo. Necesitamos encarar las razones políticas de nuestro de nuestro destrozado sistema alimentario.

(Dejar de comprar…es nuestra salvación!)

Wenonah Hauter is la Directora Ejecutiva de Food & Water Watch y autora de “Foodopoly: El Futuro de los Alimentos y la Agricultura en EEUU”. Una versión anterior a este articulo ha sido publicado en TripeCrisis.com